Lunes. Virgilio murió diecinueve años antes de que naciera Jesús, pero compartieron el mismo imperio romano. Uno como creador mítico y poeta del poder, él otro como Mesías de la Voz del Hombre. Hace años, Fogwill daba una charla en el MALBA. Un hombre del público intervino hablando sobre literatura y paranoia. Fogwill le preguntó: ¿vos sos analista? Y el tipo respondió: no, soy loco. Las dos ideas se me vinieron a la cabeza juntas hoy en un viaje en subte.
Martes. Vemos Malnazidos en Netflix, de producción española. El titulo es un poco idiota, como lo son todos los juegos de palabras. Mejor la traducción al inglés, más clásica, Valley of the deads. Charla con Robles sobre la polémica en relación a la velocidad a la que deben moverse los zombies. ¿Natural o sobrenatural? Es una discusión política. En la velocidad del zombie se juega parte del ethos del mundo. El director de Mar de muertos, la película de zombies cubana, decía en una entrevista que había que ser creativo en cómo se mata a los zombies. Ese arte de variaciones era su apuesta. Pero lo importante no está ahí, sino en cómo los zombies entran en la serie política. En la película española, los zombies, producidos por los nazis, hacen que los españoles de la guerra civil, franquistas y republicanos, se unan. La trama, la realización y las actuaciones están muy bien. Me gusta que el protagonista sea un abogado hecho capitán de la falange. (En eso no copia el modelo USA que no se permitiría jamás esa infracción. Va más allá. Es dialéctica.) Hablamos con Robles de payasos también, clowns famosos de Argentina y el mundo, y de la Semana Trágica. Hace poco también vi Backtrace con Stallone, una película menor pero interesante. Hecha con poco, las escenas de tiroteos están muy bien narradas. Se pone en acto un realismo interesante. La película en su trama, bastante menos. Stallone aparece poco. Se lo ve grande pero actúa con los ojos. Sigue siendo un excelente actor.
Más tarde. Cada vez que me acuerdo de que en la conferencia de prensa del premio Formentor, Juan Antonio Masoliver dijo que Cesar Aira era "un Vargas Llosa en miniatura" me sonrío. Esto no es un diario íntimo porque no cuento chismes.
Miércoles. La velocidad de los zombies sería un buen título para un relato donde dos amigos discuten el tema en cuestión. Después hablan de amor. Y comparan el amor con un ataque zombie. Cuando vuelven a hablar de la velocidad, ya no sabemos si se trata de la velocidad de los zombies o de algo un poco más real... Leo y escribo sobre la Base Petrel en la Antártida. Ayer, sueño que me cuelo en un sumario de Fontevecchia. Estoy vestido de traje. Escucho hablar a Fontevechia. Es bastante claro y hasta ameno. Eso me sorprende. Luego me pide que le muestre fotos. ¿Fotos de qué? En el mismo sueño me sentía incómodo y pensaba que tenía un submarino en la panza. (Hello, Doctor Freud.) Más tarde, pasé a buscar una pistola de balines que compré en Mercado Libre. Es una réplica a escala uno en uno de una Glock. En la caja se lee “Do not shoot any human or animal.” No trae manual de instrucciones.
