En tren de actualizarlo absolutamente todo el mundo se ha vuelto, como mínimo, un lugar incómodo. Ya no es sólo el peso que, cada dos por tres tiene nuevo billete. Ahora la innovación llega adonde sea uno mire. Tiene alfajores de tres pisos, bengalas en lugar de velitas, hamburguesas de carne que no es carne. La modernización impone un lema único: todo, sostiene, debe ser sometido regularmente a una sesión de chapa y pintura.

La moda es así: enciende lo nuevo a costa de hacer cenizas de lo viejo. Es entendible. Siempre ha sido así. El problema es cuando la innovación se cuela en espacios que no le corresponden: por ejemplo, como decíamos, en el rubro alfajor y por otro lado, en el rubro matrimonio.

¿Cuál es el problema con los alfajores que hay que fabricarlos con tres capas? ¿O cuál es la debilidad del matrimonio para inventar términos como poliamor o touch and go, o amigos con derecho a roce? Me dirá vintage o dinosaurio pero, en mi caso, las cosas que funcionan prefiero conservarlas así como están. 

No todo en la vida es un modelo tecnológico que merece ajustarse cada año. Nadie piensa en innovar el fútbol. O la Navidad. Entonces, ¿por qué catzo insistir en que la familia está out y hay que renovarla? ¿O que la pizza de muzarella de pronto tiene un problemita y hay que producir pizza vegana de queso que es, en el fondo, papa?

Paremos la mano con las actualizaciones. Si hasta el homebanking nos pide cada dos por tres que cambiemos la clave. ¿Cuál es el problema con la vieja clave? ¿Por qué nos hacen memorizar una nueva? ¿Qué pasó con la anterior, le encontraron de golpe y porrazo una deficiencia? ¿Es mala para el colesterol? 

Ya bastante enrevesado y caótico está el mundo para seguir sumando actualizaciones en todo. Vivimos en tiempos de fibro fácil, de bazar barato: breves, descartables, y que pase el que sigue. Y uno, de tanto en tanto, se pone algo nostálgico, revival, agarrado a las sábanas del tiempo. Y tiene también su derecho a protestar y patalear. Hasta que protestar y patalear también se debidamente pasado por una nueva actualización.