espiados

Los avances de la tecnología han beneficiado las posibilidades de comunicación e información de la población en general, pero esos mismos avances también han perfeccionado las técnicas de control y vigilancia de los factores de poder sobre las personas comunes, en especial periodistas y políticos. Con relación a este tema, en los últimos días apareció un libro que se llama "Espiados" y que investiga las diversas formas implementadas para espiar a políticos, periodistas y opositores en los últimos años en la Argentina. El trabajo, cuyo autor es el periodista Claudio Savoia, se presenta desde una idea inquietante: "La vigilancia K contra todos los argentinos". Savoia dialogó con Luis Majul en La Cornisa Radio y en la charla ofreció algunos detalles de la investigación:

 

"Es un compendio del sistema que fue desarrollando el gobierno gracias a la voluntad de poder y vigilancia y a los recursos humanos y técnologicos utilizados. Una red de vigilancia y espionaje sobre los 40 millones de argentinos, que ha utilizado organismos de inteligencia y de seguridad, organismos financieros, y otras entidades que no están para eso, como la Inspección General de Justicia y otras. Se suman unas nuevas redes de bases datos públicos, y que hacen posible para cualquier funcionario acceder a la información sobre cualquier argentino".

Según Savoia, los principales focos de vigilancia del kirchnerismo han sido los políticos de la oposición, los periodistas que investigan, y los funcionarios de la Justicia: "pero lo hacen también sobre cualquier persona y para ser utilizada en cualquier momento" Sobre la legalidad de esas acciones, el periodista sostuvo que hay un territorio de ambigüedad en este sentido, ya que muchas prácticas se justifican por la prevención de delitos y medidas de seguridad: "pero las garantías de la constitución están para proteger la intimidad de las personas en su vida diaria, tal como lo señalan los derechos civiles".

El periodista afirmó que hoy el gobierno cuenta con bases de datos, con los rasgos faciales de las personas, a partir de un programa especial: "se recolectan las huellas dactilares, las fotografías, que a su vez son analizadas por los rasgos faciales que contienen elementos únicos. Esos datos están en nuestros pasaportes y pueden llegar a manos de cualquiera"

Ante las afirmaciones de Savoia, la pregunta lógica era: ¿para qué se puede llegar a utilizar toda esta información sobre las personas?: "por ahora se están juntando muchos datos, porque la tecnología lo permite, y después se verá". Y en ese sentido, señaló el ejemplo de la tarjeta Sube, que es un sistema que recolecta mucha información privada de las personas, como son los viajes de ida y vuelta de todos los días:
"la misma ya ha sido utilizada por jueces en diferentes causas"

En la charla el autor a su vez señaló que el libro describe el funcionamiento de las escuchas judiciales, y relató el uso que en diferentes oportunidades le ha dado el juez Oyarbide a esa posibilidad: "los jueces federales tienen la potestad de hacerlo en el marco de una causa, pero se desvirtúan los sentidos. Y en muchos casos se hacen de manera irregular" Y sobre este punto, explicó el rol de la ex Side y de la actual Agencia de Inteligencia en esos mecanismos de vigilancia y espionaje.

link al audio
http://www.ivoox.com/entrevista-a-claudio-savoia-17-8-audios-mp3_rf_6959108_1.html

17 de agosto de 2015