La Ciudad de Mercedes fue una de las más castigadas por la inundación, y el hospital local fue el centro de salud que asistió a muchas de las víctimas de este penoso fenómeno. En diálogo con Luis Majul en La Cornisa Radio, el médico Rodolfo Príncipi, Director del Hospital de Mercedes, se refirió a la multiplicación de ataques, picaduras de alimañas y a otros padecimientos que han atravesado muchos habitantes de esa localidad en los últimos días. Hay que tener en cuenta que numerosos vecinos se quedaron por varias noches en los techos de las casas a la intemperie y expuestos al frío. El catedrático describió el complicado escenario de la última semana y detalló el panorama ante el regreso de los evacuados.

"Hay dos puntos a tener en cuenta en esta cuestión: el médico y el humano. Porque la inundación en ésta oportunidad cubrió sectores inundables y previsibles, pero duró mucho más tiempo que otras veces. Y eso trajo desasosiego y problemas sanitarios: porque el agua sube, eso trae alimañas como roedores, hurones, escorpiones, serpientes. Y todos se encuentran en los techos. Entonces la semana pasada en la primera noche de inundación, tuvimos los primeros ingresos por mordidas de culebras, que son ponzoñosas pero no venenosas. Es decir: la mordedura da dolor, se debe tratar con antibióticos, pero no es peligrosa si se trata a tiempo"

El médico explicó que en las primeras horas del acontecimiento, los profesionales se mantuvieron en el hospital a la espera de que el agua baje. Pero al pasar los días y mantenerse la inundación, se decidió salir a buscar a posibles necesitados de ayuda, ya que mucha gente había quedado en los techos: "esa gente estuvo a la intemperie muchos días, con frío y ropa húmeda. Y muchos toman remedios por enfermedades crónicas como asma e hipertensión, y no los tenían a mano. Entonces salimos a repartir esa medicación"

Sobre el regreso, dijo que hay que garantizarle a la gente que no existan peligros y recomendó: "cuando se vuelve a la casa, hay que ir con botas y guantes por la potencial presencia de alimañas. Evitar conectar rápidamente la energía eléctrica y llamar a la empresa que la suministra para que los orienten sobre el estado de la instalación. Dejar las puertas y ventanas abiertas. Y abrir aquellos lugares cerrados para que salgan posible alimañas. Se deben tirar alimentos, colchones y ropa humeda. Todos los alimentos, salvo los enlatados que no tengan hinchazón u oxidación. Y comenzar a higienizar todo con detergente primero, y luego con lavandina"

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14 agosto 2015