La primera expositora de la mesa fue Gabriela Fabbro que es una docente de la Universidad de Palermo que está a cargo de un proyecto de seguimiento y monitoreo de la calidad de programas de la televisión abierta argentina. Las impresiones de la expositora fueron el contexto ideal para que los otros panelistas expongan sus opiniones sobre la TV, el rating y la calidad de la programación.

"El consumo de datos de rating está desbordado-planteó Pablo Sirven-. Es una temática masiva y en todos los medios se habla de rating. Ya no es para especialistas. Además, se lo utiliza para hundir o levantar a personajes amigos o enemigos. Creo que es una herramienta útil, pero está bastardeada porque se la utiliza de manera deportiva."

Luis Majul coincidió en parte con el planteo ya que señaló que "el rating genera que sea necesario rendir examen constantemente y esa situación le hace mal a la tele." Más allá de eso, entendió que la televisión argentina es la mejor de latinoamérica, y tal vez, una de las mejores del mundo.

Sirven también opinó que el problema del exceso de datos de rating se agravó con el minuto a minuto: "A partir de esos datos se toman decisiones sobre contenidos de programas en el mismo momento en que sale al aire. El minuto a minuto es una herramienta valiosa pero para un análisis contextualizado"

Sobre la televisión en general, el conductor de La Cornisa sostuvo que la TV está en problemas cada vez que no se toman riesgos. En ese sentido, puso como ejemplo de programa que asumió riesgos y fue exitoso, a TV por la identidad: "Logró entretener, informar y responder a los parámetros de calidad." Sirven, sobre el mismo punto, señaló que un valor fundamental de la televisión es la diversidad; "cuando todo es igual, hay problemas."

En otro momento de la charla, Majul hizo especial referencia al "morbo" de la TV actual: "Eso involucra a quienes la hacemos, ya que las situaciones nos llevan hacia ese lugar; y también a quienes vemos televisión; por ejemplo, cada vez que vemos Patinando por un sueño y esperamos que alguien se caiga. Policías en acción es un 80 por ciento morbo: musicaliza la violencia. "

Ni Sirven ni Majul entienden que el rating debe ser parámetro de calidad. El periodista de La Nación sostiene que en tele importa la calidad pero también la cantidad: "Hacer tele es caro y requiere que sea masiva. Pero eso no quiere decir que la televisión no tenga que darle un espacio a los programas culturales."

"No me molesta que la tv entretenga -concluyó Majul-. Calamaro una vez dijo que había aprendido de Dylan, pero también de Gilda. No hay que avergonzarse de una televisión con elementos de la cultura popular. Más allá de eso, raras veces el rating es parámetro de calidad. Y no tendría porque serlo."

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