Por Pablo Llonto. Para cerrar el año el capitán de San Lorenzo no pudo elegir algo peor. Hacerse el guapo después de una derrota. Y en una entrevista que le realizaron la semana pasada en radio América le dijo al periodista Mariano Closs: “Nosotros prácticamente no podíamos ir al roce, cada nena que tocabas se caía. Ibas a trabar fuerte... 'foul', ibas al choque...'foul'. Tendrían que venir aquí a jugar un ratito. Nosotros jugamos al fútbol que nosotros sabemos, ellos no están acostumbrados al roce"

Juan Mercier cree que de esa manera salvará el honor de un San Lorenzo que fue a buscar la Copa como pudo y que, rendido ante la superioridad del rival admitió, mayoritariamente, que el 2 a 0 fue un buen resultado.

Mercier sabe cuanta distancia futbolística hay entre un Real Madrid que juega como juega, y un San Lorenzo que juega como le da el cuero. Allá él con sus limitaciones si piensa que los hinchas convertirán sus palabras en sabias excusas.

Preocupa más la actitud del entrevistador Mariano Closs. Consumó la típica complacencia del periodista. Gesto muy habitual en los reportajes con deportistas y entrenadores, no sólo se dice que sí a todo, sino que se potencian las manifestaciones cancheras. El periodista cree que canchereando con un canchero, su entrevista es más canchera. Demuestra así que no tiene ideas propias, o lo que es peor: si las tienes no sabe cómo expresarlas.

Así tuvimos a Closs dándole la razón a ciertas afirmaciones de Mercier a favor de un fútbol con un toque de violencia. Según el relator en esos partidos clave hay que darles un poco más duro a los futbolistas superiores. De a ratos insinuaba que los árbitros de los partidos FIFA son demasiado exigentes con el reglamento y los criticaba porque “para el árbitro FIFA cada roce es infracción”.

Consentir a un futbolista como Mercier cuyas reflexiones sobre un partido iban siempre en el mismo sentido (“el jugador argentino te raspa, sale a buscar…”) desnudan a un periodismo al que todo le da lo mismo.

Tampoco sabemos qué ocurrió en la agencia Telam cuando reprodujeron el tramo del reportaje: “El 'Pichi' también se refirió al enfrentamiento futbolístico con los jugadores del conjunto español, al señalar que "cada jugador que tocabas se caía y te cobraban foul. Tendrían que venir acá a jugar un ratito".

De pronto, el término “nenas” había desaparecido. ¿Para cuidar a Mercier?

Muy preocupados por sus dichos, desde Madrid llegó el silencio.

Mercier andará buscando otro periodista que le haga seguidismo macho. Ya lo encontrará. Porque desafortunadamente, como Closs hay todavía unos cuantos. Y así estamos.