UNA RED SOCIAL FRENTE A LAS GRANDES NOTICIAS
¿Cómo Facebook compite con los medios informativos?

FacebookStencil CromagnonPor: Sebastián Di Domenica. Hace algunos meses escuché que varios analistas decían que para conocer las características de los medios de los próximos años había que mirar en detalle el funcionamiento, la mecánica y los contenidos que ofrece la red social Facebook y otras similares. En el momento en que leí la afirmación, recordé las aburridas novedades que presentan este tipo de redes, y me convencí de la baja probabilidad de esa opción o tendencia. Me parecía muy poco probable que alguien deje de leer periódicos y medios informativos para quedarse únicamente con las noticias que se publican en el marco del grupo de amigos y conocidos. En mi opinión novedades como: “hoy comienzo la dieta” o “fui con amigas al cine y me encantó la película” de ninguna manera podían competir con noticias de todos los rincones del mundo o con amplias columnas de opinión y análisis de los especialistas. No era probable que alguien decida quedarse en su micromundo de conocidos y desconocer todo lo que ocurre en el mundo exterior. Sin embargo, un hecho noticioso que ocurrió la semana pasada; la sentencia en el Caso Cromagnon, me permitió reconocer y aceptar que efectivamente Facebook con su mecánica social puede llegar a competir con medios informativos de una manera diferente y novedosa. Y así lograr que el usuario se entere de lo que ocurre afuera sin alejarse del micromundo de amigos y conocidos del mundo virtual.

El Caso Cromagnon

La semana pasada en la Ciudad de Buenos Aires y en todo el país había una enorme expectativa frente a la lectura del fallo por la tragedia de Cromagnon. Desde hacía varios días, los medios hablaban del tema y anticipaban posibles reacciones frente a las condenas. Finalmente llegó el día y durante la tarde los medios transmitieron en directo todas las instancias: en la tele, en la radio y en los portales de los diarios era posible seguir el minuto a minuto de las novedades que ofrecía el caso. La noticia generaba una innumerable cantidad de opiniones y reacciones y los acontecimientos rebasaron las fronteras de los medios. Tecnología mediante, Facebook también se convirtió en un espejo del fenómeno, en una fuente de noticias y en más que eso. 

Desde Facebook

Conectado a mi red de contactos en Facebook, pude observar cómo con oraciones cortas y sintéticas, varios de mis conocidos (algunos casi desconocidos) anunciaban lo principal de la noticia en el preciso momento en que ocurría: “En pocos minutos la lectura del fallo”; “Condenaron a Chaban a veinte años”; “Los Callejeros fueron absueltos”; “Indignación de familiares de las víctimas por gesto de la mamá de Pato Fontanet”; “Hay disturbios en la puerta de Tribunales”. Era un estilo de información telegráfica que le permitía al remoto lector enterarse del dato central o fundamental de la historia. Eran frases sintéticas que en pocas palabras le ofrecían a quien quiera leer retazos de la noticia; y datos centrales del veredicto de un tribunal sobre una tragedia que de una u otra manera tocó a todos los habitantes de la ciudad y del país.

Luego el análisis

Cuando todo el  mundo ya sabía lo principal de la noticia: Chaban condenado y Callejeros absueltos; comenzaron los comentarios. Un pensamiento aislado sobre esos resultados o sobre un detalle de la noticia, generaba una gran cantidad de comentarios con opiniones a favor y opiniones en contra en relación a la decisión de la justicia. El lector remoto podía sumarse y exponer su mirada o simplemente leer lo que decían los otros. Era posible analizar mayorías, minorías y corrientes de pensamiento más numerosas. Lejos de la abrumadora cantidad de comentarios que llegan a las notas de los diarios, en este caso se presentaba un número de pensamientos accesible; que invitaba a la lectura y al análisis.

En síntesis

Por la noche escuché algo de radio y me senté a ver en la TV el resumen de noticias de la noche. La historia del día ya la conocía en detalle. Había seguido el minuto a minuto según ocurrían los hechos a través de otros lectores. Muchas de las opiniones que se escuchaban en el programa de radio, se parecían a las que había leído entre mis conocidos o entre conocidos de mis conocidos. Sólo había estado conectado a Facebook; y estaba tan informado como los que se habìan informado por los medios de comunicación tradicionales todo el día.

Por supuesto, no cambio por nada la lectura del diario en papel y en digital. Puede ser sobre el sillón y página por página. O en frente de la pantalla, y con el Mouse para pasar de un contenido a otro. Tampoco cambio por nada nuevo el consumo de noticias a través de la radio y la televisión. Disfruto al máximo cada una de esas opciones. La radio de fondo y el té en la mesa o el gran almohadón y el control remoto como única brújula. Pero acepto, hay que aceptarlo, que Facebook a través de los otros puede competir con los medios. Y convertirse en una fuente de noticias para aquellos que quieren ver lo que ocurre lejos o cerca, en pocas palabras y a través de los ojos de sus amigos y conocidos.

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