Es cada vez más común cruzarse en las calles con personas que los usan, incluso entre adolescentes. Son los cigarrillos electrónicos que han ganado terreno más allá de no estar aprobados y provocar riesgos reales en la salud. En las últimas semanas varias muertes en Estados Unidos, como consecuencia del uso de éste dispositivo de vapeo, generó alarma en todo el mundo y también en Argentina. En diálogo con "La tarde de CNN", Jorge Caneva, jefe del Servicio de Neumonología de la Fundación Favaloro, expuso su análisis de la situación.

“En Argentina está prohibido el cigarrillo electrónico", dijo en primer lugar el especialista. Y sobre el punto remarcó que lejos de ser un medicamento (para dejar de fumar), es un elemento que no tiene controles, y "realmente toxico en base a lo que empezamos a conocer por las primeras muertes en Estados Unidos”, explicó.

Tal como amplió el médico, el ser humano está orgánicamente conformado para respirar aire y no humo: “El sistema respiratorio está preparado para respirar aire limpio. Y todo lo que no sea así es nocivo”, puntualizó.

Y remarcó que el cigarrillo electrónico no cumple con el rol que muchos le atribuyen, como mecanismo para abandonar el cigarrillo. Sobre el mismo punto explicó que "el problema es global, y al no estar sometido a los procesos de investigación clínica, se puede hacer cualquier mezcla en los líquidos”, con consecuencias insospechadas para la salud de la persona. "No son ni eficaces ni seguros", concluyó en diálogo con Luis Majul.

Cabe recordar que ayer en Estados Unidos en los medios de comunicación se informó que un hombre de 40 años se convirtió en la séptima víctima fatal por el uso de cigarrillos electrónicos en ese país. Ante la noticia el estado de California anunció que realizará una campaña de US$ 20 millones para informar sobre los riesgos del vapeo y su posible relación con el cáncer pulmón.