La segunda ola de la pandemia del coronavirus ya está en plena circulación en la Argentina. Los datos que reflejan el marcado aumento de contagios son la prueba más real. Con la suba de casos, también ha crecido la preocupación e incertidumbre de parte de las autoridades y de la sociedad, por las consecuencias que pueda tener en la ocupación hospitalaria. En diálogo con el programa "Esta mañana", el médico Conrado Estol expuso su mirada y reflexión sobre la actual situación.
En el inicio del intercambio, el profesional sostuvo que los altos porcentajes de casos positivos en los testeos señalan que se está testeando poco. A su vez alertó sobre sanatorios completamente llenos, y con pacientes sin cama disponible:
"No había camas en la mayoría de los sanatorios privados para un paciente que conozco. Estaba con neumonía y necesitaba oxígeno. Era un caso entre moderado y severo. Es decir que la situación es delicada", sostuvo.
El médico explicó que se necesitan medidas de restricción que no cierren toda la economía, "pero que corten las actividades superdispersadoras. Y hay que pensar en el mes actual. En abril, que es el mes crítico. Y no en los meses posteriores", afirmó.
En el intercambio, Estol también habló de la vacuna Astra Zeneca, y de la decisión de muchos países de dejar de utilizarla: "porque en muy poca gente, y hubo varios fallecimientos, produce un anticuerpo que activa las plaquetas. Eso conlleva el peligro de formar coágulos. Y eso puede causar un trombo, que puede ser muy serio en órganos como el corazón o el pulmón", detalló.
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